10 claves para alcanzar la felicidad
Docente de la Escuela de Psicología USAT
No obstante, si la respuesta hubiese sido No, la siguiente pregunta sería ¿quiero ser feliz? lo que se responda dependerá el camino a seguir; la creencia que la felicidad solo pocos pueden alcanzarla dificulta el recorrido, ya que el pesimismo hacia la vida y agobio por los impasses serán limitantes.
Había una vez un pequeño niño que no podía alcanzar un globo alojado en lo alto de un árbol, trataba de saltar y aun así no lograba su cometido, cansado de intentar decide sentarse al pie del árbol y cerrar los ojos, se sentía muy cansado para seguir intentando. En ese momento tuvo un sueño, una mariposa apareció ante él y le dijo que no dejara de intentar si es que el globo de verdad lo quería, a lo que el niño respondió ¿cómo puedo alcanzarlo si no llego hacia el?, la mariposa sonrió y le susurró en su oído la respuesta…
La felicidad puede ser aquel globo alojado en lo más alto, difícil de alcanzar, pero también puede ser una oportunidad para identificar las fortalezas, utilizarlas y hacer el cambio. Nada cambia si la persona no está decidida a hacerlo. He aquí 10 claves para iniciar en el camino hacia la felicidad:
- Gratitud, agradecer a Dios por un nuevo día; por lo que se tiene y por lo que se da; por la experiencia vivida; la gratitud consiste en apreciar los detalles de la vida, estar agradecido consigo mismo y con aquellas personas significativas por el resultado. Escribir todos los días al levantarse tres cosas por las que agradecer.
- Resiliencia, para desarrollar la capacidad de recuperarse de eventos adversos, es necesario despojarse del estrés y ansiedad. Realizar ejercicios de meditación y relajación, así como resolución de problemas y plasmar metas realistas destinadas a alcanzar.
- Propósito y pasión por la vida, tener objetivo en la vida y darle significado serán condiciones para que las experiencias como resultado del proceso, se conviertan en una historia trascendental en nuestra vida. Establecer un propósito demanda esfuerzo; empezar por pequeñas actividades que nos motiven y entusiasmen realizarlas.
- Relaciones sociales saludables, interactuar con los demás, permite reconocer y aprender del otro, cabe distinguir que esa cercanía debe ser saludable. Identificar aquellas personas las cuales brindan apoyo y confort en momentos oportunos, alientan a continuar y son ejemplos que invitan a ser mejor cada día.
- Optimismo, rescatar aspectos e interpretar positivamente los eventos ayudará a hacer frente a condiciones de estrés, maximizando la capacidad para resistir a los sucesos; contar con mentalidad positiva no significa hacer caso omiso a los desafíos a fin de mantener el equilibrio, al contrario, es adoptar estrategias de afrontamiento y aprender de la experiencia.
- Sentido de humor, ayuda a la persona a tener una vida relajada y llena de emociones gratificantes. Una reacción específica es la risa, la misma que mejora el estado de ánimo y ayuda a sentirnos plenos con la vida en general. Sonreír es un buen primer ingrediente.
- El perdón, nos libera del pasado y permite nuestro progreso personal, social y espiritual. El psicólogo Martin Seligman sostiene que “no puedes hacer daño al culpable no perdonando, pero si puedes liberarte perdonando”, el perdón ayuda a la persona a reconciliarse en el presente y por ende tener una visión esperanzadora del futuro.
- Expresión de emociones, el contener y almacenar las emociones no es recomendable; por tanto, expresarlas es fundamental para el procesamiento de las experiencias; exteriorizar lo que sentimos fortalece a la persona.
- Comunicar, expresar las emociones es importante, así como también lo es comunicar lo que se siente, es fundamental identificar lo que sentimos y otorgarle un nombre; la confianza de quienes nos rodean aportará seguridad en el proceso.
- Salud física y mental, realizar ejercicio físico, tener una alimentación balaceada, calidad de sueño, del mismo modo practicar la meditación entre otros, son condiciones para acrecentar el bienestar.
Alcanzar la felicidad es como un viaje, este puede tener un camino corto o largo, empedrado o plano, lo que sí es seguro que el destino que nos espera será satisfactorio. Practicar diariamente, tener actitud positiva y sobre todo, no olvidar en cada paso ¡sonreír!