“Donde existe Justicia Social, no existe pobreza”
Hace 10 años, la Organización de las Naciones Unidas proclamó el 20 de febrero de cada año, como el Día Mundial de la Justicia Social. Una justicia que se inclina por los temas como la igualdad social, que busca un Estado de bienestar, reducción de la pobreza, igualdad de oportunidades y una justicia que vela por los derechos laborales.
En ese sentido, se puede hablar de Justicia Social, “cuando hay igualdad social”. Es decir, cuando en un estado todos sus ciudadanos sin exclusión alcanzan en la práctica la realización de sus derechos humanos; principalmente sus derechos civiles y políticos y porque no decir sus derechos económicos, sociales y culturales, todos estos derechos son imprescindibles para lograr una justicia social. La igualdad social no acepta ningún tipo de discriminación por motivo de origen, raza, sexo, idioma, religión, opinión, condición económica o de cualquiera otra índole. Diversas son las constituciones a nivel mundial que recogen este derecho a la igualdad social, hasta la OEA lo hace en la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
Por otro lado, se puede hablar de Justicia Social, cuando unos de los pilares de esta Justicia “es lograr un Estado de bienestar”. Es decir, un Estado que no solamente provea de políticas públicas escritas, sino que provea de servicios en cumplimiento de los derechos sociales a todos sus habitantes; que todos puedan acceder a los distintos servicios que brinda el Estado, como luz, agua, desagüe, centros de salud, la Policía Nacional del Perú, las escuelas públicas, Universidades Públicas, etc. En el fondo de estos servicios están inmersos diversos derechos tales como el derecho a la vida, la salud, la tranquilidad pública, la seguridad y la educación.
Se puede hablar de Justicia Social, cuando el Estado a través de diversas políticas públicas “busca reducir la pobreza”. Es decir, el Estado debe tener una salida frente aquella situación o condición socioeconómica de aquella población que por distintos factores económicos no pueden acceder a los recursos para satisfacer sus necesidades básicas (como la salud, la alimentación y vivienda), y; que le permitan a los ciudadanos tener una adecuada calidad de vida. Frente a ello, ¿De qué manera el Estado erradicaría la pobreza? Fomentando una buena educación, logrando una educación primaria universal, luchando por una Justicia Social, por la igualdad, generando muchas fuentes de empleo y fomentando la educación Familiar.
Se puede hablar de Justicia Social, cuando dentro de un Estado “hay igualdad de oportunidades”. Es decir, igualdad entre todas las personas que tengan las mismas posibilidades de acceder al bienestar social. Ésta igualdad de oportunidades se da cuando cada persona tiene el mismo acceso potencial a un cierto bien social o económico que cualquier otra persona. Es una situación social según el cual las personas tienen las mismas oportunidades o derechos en algún aspecto.
Se puede hablar de Justicia Social, “cuando un Estado vela por los derechos laborales”, derechos que devienen del derecho al trabajo factor humano fundamental por el que toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección del mismo, a la protección frente al desempleo, sin discriminación, con igualdad salarial, remuneración digna y protección social. El derecho al trabajo está contemplado dentro de la Declaración Universal de Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales; asimismo, a nivel internacional en la Carta Social Europea.
De modo singular, en el Perú existen diversas políticas públicas que intentan alcanzar una Justicia Social para todos. Sin embargo, lamentablemente el Estado Peruano a través de sus representantes piensa que el Perú es Lima, y que Lima es sólo Miraflores. Vivir en Justicia social, es vivir en un Estado de bienestar, con igualdad social, donde se trabaje mucho por erradicar la pobreza, donde haya igualdad de oportunidades, donde hayan fuentes de empleo.
Finalmente, un país pobre es un país donde no existe justicia social. Ergo, donde existe Justicia Social, no existe pobreza.