Consejos para prevenir y combatir la depresión en tiempos de COVID-19
Por: Dra. Marilia Cortez Vidal
Docente de la Escuela de Psicología USAT
Docente de la Escuela de Psicología USAT
La pandemia dejará una marca en nuestra historia. Recordar que en algún momento era lejano lo que escuchábamos en las noticias sobre un nuevo virus que estaba afectando a la población asiática, nunca imaginamos que podría cruzar fronteras e instalarse a nivel mundial. Las medidas de prevención se hicieron notar, uno de ellos: el distanciamiento social.
Cada familia tuvo que adaptarse a una nueva forma de vida y en algunos casos observar cómo sus miembros y personas cercanas no pudieron vencer al COVID-19, dejando heridas inimaginables.
El malestar emocional y los deseos de despertar y creer que es un sueño suele ser el común denominador de la mayoría de las personas, varios aspectos de sus vidas se han visto afectadas, la salud mental se ha vulnerado, dando cabida a diversas manifestaciones que ponen en riesgo al bienestar; ya que enfrentarse a noticias diarias, desestabilidad en la economía familiar, pérdida de empleo u otros, son eventos que podrían desencadenar un desborde emocional, abriendo camino a la depresión.
El ser humano es complejo, en un momento crucial de su vida puede encontrarse abrumado, desesperanzado e indefenso. El Instituto Nacional de Salud Mental (National Institute for Mental Health) sostiene que la depresión al tratarse de un trastorno del estado de ánimo, tiene un efecto negativo en la persona manifestándose en el cómo se siente, piensa y maneja las actividades diarias por ejemplo dormir, comer y trabajar; así también incluye un estado de ánimo triste, ansioso o “vacío”, irritabilidad, sentimientos de culpa y pesimismo.
Existen factores protectores que pueden ayudar a la persona a no desarrollar cuadros depresivos, se enumeran algunas de ellas: control de emociones, serenidad ante circunstancias que podrían generar presión, identificar dificultades y capacidad para brindar soluciones, relaciones personales satisfactorias.
Lograr prevenir y combatir la depresión, requiere de pautas que podemos tener en cuenta y estas son:
- Ante dificultades o eventos estresantes, prestar atención al evento y buscar a través de una lluvia de ideas, alternativas de solución, seleccionar la que es posible de realizar, no enfocarse en aspectos negativos de la circunstancia, ya que ello no favorecerá a desarrollar estrategias o identificar las que ya se contaban.
- Tener una actitud optimista, es necesario reconocer que cada día no es como el día anterior, si realizamos una retrospectiva del inicio de la pandemia podemos analizar que cada día ha ido variando, aunque continúen las restricciones, lograremos identificar una nueva forma de “normalidad” de todo ello, encontrar esperanza ayuda en ese proceso.
- Buscar productividad en el tiempo libre, no otorgar al aislamiento sinónimo de “cárcel”, realizar una lista de actividades y/o culminar aquellas tareas que por la sobrecarga del trabajo u otros se dejaban postergadas, es necesario señalar que un indicador de riesgo que va de la mano con la pasividad es el quedarse absorto en sí mismo abriendo puertas a pensamientos negativos y catastróficos, por tanto la persona tiene la decisión de evaluar lo que acontece como un reto e identificar objetivos a mediano y largo plazo.
- Organizar el horario, producto de la pandemia se ha desestructurado las rutinas que usualmente manteníamos y ello podría generar en la persona inmovilización en cuanto al orden para realizar sus actividades, convirtiéndose como factor de riesgo para la depresión, se recomienda planificar el tiempo y las tareas a realizar; marcar las ya desarrolladas y observar aquellas pendientes.
- Mantener contacto con los demás, el distanciamiento social, no significa crear una barrera que anule toda comunicación con las personas que nos rodean, al contrario, es una oportunidad para fortalecer las relaciones familiares y amicales, el grupo social fortalece la autoestima, el afecto y la gratitud, indicadores que ayudan a combatir la depresión.
Recordar que es natural sentirse angustiado, enojado, triste y a pesar de ello es fundamental replantear la perspectiva y autoevaluarse, dándose la oportunidad a valorar y darle un significado a lo que acontece hoy, replantear aspectos de su vida, fortaleciendo habilidades. Tener en cuenta que cuando la pandemia “tenga su caída”, el salir libremente tendrá un nuevo significado y sentido a lo que se pueda encontrar en el camino; la pandemia podrá propiciar pensamientos de mortalidad, pero reformulando ese pensamiento en positivo ayudará a reconocer lo que es importante en la vida, tener relaciones significativas, contribuir al bienestar de la sociedad y ser creativo.
