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Creatividad e ingenio para combatir la pandemia

Dicen que las peores situaciones, siempre sacan lo mejor de nosotros. Eso lo han demostrado muy bien cientos de peruanos, quienes, en vez de lamentar las consecuencias del COVID-19 en sus negocios, han tomado la delantera y le han sacado la vuelta a la pandemia con una serie de emprendimientos creativos e innovadores que han dejado sorprendidos a más de uno.

Con la llegada de este virus a nuestro país, uno de los primeros elementos que debíamos tener a la mano era una mascarilla. Esta gran necesidad generó que pequeños empresarios cambiaran de rubro y comenzaran con la maratónica tarea de diseñar miles de tapabocas. Es allí donde el ingenio dominó los corazones de estos emprendedores,quienes le añadieron una pizca de sazón a sus creaciones.

Desde ese momento, vemos cómo han ido apareciendo mascarillas para todos los gustos. De color entero, multicolor, con dibujos para los más pequeños, con un diseño simple, de diferentes modelos, tamaños y materiales. Tanta es la creatividad y la solidaridad del peruano, que un grupo de empresarios ha elaborado estas máscaras con un espacio transparente para que las personas sordomudas puedan leer los labios.

El fenómeno de la innovación trascendió mucho más allá de estos cubrebocas y surgió la idea de crear una serie de protectores faciales que permitirían a los ciudadanos estar más resguardados. La imaginación no se hizo esperar y ahora vemos como algunos adultos comienzan a emplear estos escudos del rostro, con cascos, gorros, sombreros e, incluso, los más pequeños pueden combatir cara a cara a este virus, al estilo de sus personajes de ficción favoritos.

Y del cuidado de la cara pasamos hasta los pies. Es así como en los últimos días se han popularizado las bandejas desinfectantes para el calzado, las cuales deben ser utilizadas antes de ingresar a nuestra casa y recorrer todos sus ambientes. Muchos empresarios del mercado han apostado por su fabricación pues son una manera de promover la limpieza y evitar la proliferación del COVID-19.

No podíamos dejar de lado a los famosos mamelucos que nos harán sentir y parecernos a los hombres del espacio. Hoy en día miles de emprendedores han comenzado a fabricar estos implementos tan necesarios para el personal de salud, pero al mismo tiempo, para todos aquellos que no escatiman en protección y quieren evitar a toda costa el contagio de este virus.

Otra idea creativa de los peruanos es la creación de cabinas portátiles de desinfección, como la que un joven innovador puso en marcha en Arequipa. Empleando elementos como la glicerina, el agua oxigenada y el agua pura, se promovía una limpieza adecuada. Este tipo de herramienta ha sido implementada en algunos mercados del país y personas particulares también la han instalado en sus propias casas.

Si hablamos de creatividad e ingenio tampoco podemos dejar de lado a los dueños de bodegas o pequeñas tiendas, quienes durante este tiempo de cuarentena han cumplido una importante función: surtirnos de alimentos. Es así como algunos de ellos han tenido la maravillosa idea de crear un sistema de entrega de productos y recepción de dinero, con ayuda de algunos materiales que podemos tener en casa.

Esto sucedió en Pucallpa (Ucayali), donde los propietarios de una tienda instalaron un tubo de plástico para ingresar el dinero, el cual, caía en un envase con alcohol para ser desinfectado. Luego, el vendedor le entregaba el producto adquirido mediante una rampa construida con madera y tela. De esta manera, evitaban el contacto directo y el contagio con las personas.

Pero no solo los bodegueros han ideado técnicas de protección nunca antes vistas, sino también los empresarios de la industria textil, quienes han creado un cobertor plastificado para que los taxistas y otros conductores de vehículos de transporte público, puedan estar separados de los pasajeros, a quienes trasladan todos los días y representan una fuente de ingresos para la situación crítica que actualmente vivimos.

Este novedoso invento surgido en San Juan de Lurigancho es un tapiz parecido al de una mototaxi, el cual, cuenta con un orificio rectangular que sirve para efectuar el pago al chofer del carro y, al mismo tiempo, garantizar el distanciamiento social obligatorio de dos metros entre las personas. Así, nace el protector contra el COVID-19 elaborado exclusivamente para vehículos.

No cabe duda que los peruanos tienen mucho talento en las venas y eso lo han demostrado con sus ganas de enfrentar a la pandemia. Existen miles de emprendimientos, proyectos innovadores e ideas creativas que han surgido a raíz de la aparición del COVID-19 en nuestro país. Estamos a la expectativa de las nuevas propuestas que se desarrollarán con el paso del tiempo para aligerar esta pandemia, mientras tanto…¡pongamos manos a la obra!

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