La importancia bioética en el reconocimiento del Día del Niño por Nacer
Por: Mtro. Blgo. Antero Enrique Yacarini Martínez.
Facultad de Medicina USAT
Miembro del Instituto de Bioética
Facultad de Medicina USAT
Miembro del Instituto de Bioética
Cada 25 de marzo desde el año 2002, en nuestro país se conmemora el “Día del Niño por Nacer”, a partir de la promulgación de la Ley N° 27654, la cual fue aprobada ese mismo año, con el propósito de proteger la vida desde el vientre materno y el reconocimiento de los derechos del no nacido. Esta norma tiene como base la Constitución Política del Perú que en su artículo primero afirma que: “La defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad son el fin supremo de la sociedad y del Estado”.
Por otro lado, a la luz de la evidencia científica, desde el punto de vista embriológico y genético, la vida humana comienza tras la fecundación, con la aparición de una realidad celular con un genotipo y fenotipo específico. La fecundación, por tanto, es un proceso que dura horas, y solo tras la conformación del cigoto, al final del proceso de fusión de los gametos, se establece la identidad genética del nuevo individuo que en este caso es de la especie humana.
En ese sentido y según lo comentado por la Dra. Natalia López Moratalla (2004), la génesis del nuevo ser humano tiene lugar con la constitución del cigoto y la interacción molecular y celular, por tanto, tiene la capacidad de poner en marcha un proceso con una serie ininterrumpida de divisiones celulares, guiadas según mecanismos muy precisos mediados por iones, especialmente de calcio, y un «programa» bien definido de desarrollo progresivo y de diferenciación de estructuras y funciones, mediante procesos de mitosis y meiosis.1,2
En la actualidad, muchos de los adelantos biotecnológicos como el uso de células madres, fecundación in vitro, investigación con embriones, clonación, entre otros, tienen relación directa o indirecta con el comienzo de la vida humana; así mismo el debate jurídico actual sobre el aborto pone en riesgo el reconocimiento del estatuto biológico del embrión humano: es decir el inicio de la vida humana y la protección al nasciturus, desde su procreación, su etapa gestacional y nacimiento. 3,4
En conclusión, la importancia bioética del reconocimiento del Día del Niño por Nacer no solamente radica en una fecha en particular sino en la valoración como persona humana desde el momento en que ha sido concebido estableciéndose en el ámbito familiar a través de los primeros vínculos afectivos y como sociedad valorando, protegiendo y defendiendo siempre esta etapa vulnerable de la vida humana.
Bibliografía.
- López Moratalla, N. La realidad del embrión humano en los primeros quince días de vida. bioet; 8(20/21): 6-23, ene.-abr. 2004.
- Arango Restrepo P. ESTATUTO DEL EMBRIÓN HUMANO. Esc [Internet]. 11 de agosto de 2020 [citado 19 de marzo de 2021];24(53):307-18. Disponible en: https://revistas.upb.edu.co/index.php/escritos/article/view/233
- Aznar, J. El embrión humano: un ser biológico en peligro. Instituto de Ciencias de la Vida. Tomado de Observatorio de Bioética. Universidad Católica de Valencia. Diciembre del 2006.
- López Moratalla, N. Los quince primeros días del embrión humano. EUNSA, Pamplona, 2004
Ciccone, L. Bioética, Historia. Principios, Cuestiones. Ediciones Palabra, Madrid. 2005.
