Retos de los Viajes Burbujas o Corredores Seguros
Por: Aylen Serruto Perea
Directora de la Escuela de Administración Hotelera y de Servicios Turísticos USAT
Directora de la Escuela de Administración Hotelera y de Servicios Turísticos USAT
Desde el 26 de febrero fecha en que se dio a conocer el primer contagio en América Latina, los gobiernos tuvieron que implementar una serie de estrategias para afrontar al Covid-19, donde la medida más importante fue el cuidado de la persona; donde los gobiernos de los diferentes países decretaron cuarenta, siendo el Perú uno de los primeros países latinoamericanos en hacerlo, con lo cual se trató de evitar el incremento de contagios por el virus, afectando enormemente a la economía y en especial al sector turismo, siendo uno de los más perjudicados debido a las cancelaciones de viajes, cierre de fronteras, entre otros.
Una de las estrategias que se están proponiendo para reactivar la economía del sector turismo son los llamados “Viajes Burbujas” o “Corredores Seguros” los cuales se pueden dar en espacios tanto locales, provinciales, regionales e internacionales donde las personas, en este caso los turistas, puedan transitar debido a que existe un nivel de seguridad óptimo y las estadísticas de probabilidad de contagio sean mínimas o equivalentes al lugar de origen.
Los “Viajes Burbujas” pueden ser una estrategia para la reactivación del turismo generando un movimiento económico interesante para los espacios en donde se dé, lo más importante es que estos lugares deben tener la seguridad de que se estén cumpliendo con todos los protocolos establecidos tanto en el país de origen como en el de destino. En el caso de Perú, MINCETUR cuenta con diferentes protocolos para cada una de las actividades del sector, por ejemplo, para hoteles categorizados, para Apart-Hotel, albergues, restaurantes (el servicio de entrega a domicilio y atención al público) ,para la realización de eventos (en el marco del turismo de reuniones), para las agencias de viaje y turismo y para el guiado turístico. De igual forma, se han implementado protocolos de bioseguridad para el Turismo de Aventura; lo cual, facilitará en gran medida el buen funcionamiento de la reactivación del turismo a través de los “Corredores seguros” o los “viajes Burbuja”.
Algunos de los primeros países europeos que ya han implementado estos corredores son Estonia, Letonia y Lituania donde los ciudadanos tienen libre circulación, lo cual no sucedería con turistas de otros países que viajan a estos países bálticos ya que tendrían que permanecer en cuarentena.
Otros de los países que están utilizando esta estrategia de “Burbuja Viajera” son los países de Australia y Nueva Zelanda, teniendo en común que han sabido controlar de forma eficiente la propagación del Covid-19, permitiendo reactivar su economía con mayor prontitud que otros países.
Lo interesante de esta estrategia es que se debe tener ciertos aspectos que permitan tener un control sobre los visitantes que llegan a hacer turismo a estos espacios considerados corredores seguros. Por ejemplo, en los países Bálticos, el turista no ha debido de viajar fuera de estos países en los 14 días, no haber estado en aislamiento por haberse contagiado por COVID-19 o haber estado cerca de personas contagiadas con el virus y tener algún síntoma de problemas respiratorios, además de que se deben de cumplir con todos los protocolos de bioseguridad y respetar los distanciamientos establecidos.
En nuestro país el Ministerio de Transportes y Comunicaciones informó que el Perú empezará nuevamente a realizar vuelos internacionales, pero a destinos con ruta corta. Los países que fueron elegidos son Chile, Colombia, Brasil (Sao Paulo), México, Ecuador y Panamá. Al analizar las estadísticas sobre los contagios en todos estos países nos podemos dar cuenta que el nivel de contagios es similar exceptuando a Brasil, país donde aún mantiene un gran número de personas con el virus.
Por lo tanto, se puede concluir que la implementación de esta estrategia depende del buen desempeño de todos los actores que intervienen en el servicio turístico en forma permanente y con el mismo nivel de seguridad en todos los servicios, siendo esta la única forma en que la reactivación del turismo sea una realidad; por otro lado, los visitantes, huéspedes, comensales, deben de respetar las normas de distanciamiento y el uso de implementos requeridos para viajes a otros países o realizar un turismo interno; esa será la única manera que funcione la reactivación del turismo en nuestro País.
Por lo tanto, el compromiso de cada uno originará vivir un turismo responsable.
