Soluciones de ingeniería para un mundo sostenible
Decano de la Facultad de Ingeniería USAT
Y son muchos países que celebran el día de la ingeniería o la arquitectura en diferentes fechas, pero siempre bajo el paraguas del día mundial. En el caso peruano, cada 8 de junio se celebra el Día del Ingeniero como homenaje a la creación del colegio profesional donde convergen los ingenieros en sus distintas especialidades, el Colegio de Ingeniero del Perú – CIP, fecha que fue oficialidad mediante la ley N°24648. A su vez, se celebra el Día del Arquitecto debido a que el 8 de junio del año 1962 fue promulgada la ley de creación del Colegio de Arquitectos del Perú (CAP): Ley Nº14085. Ambas profesiones representan de las mejores fuerzas de cambio en este país y como tal debe tener un rol relevante en las oportunidades y tareas que se presentan en el nuevo enfoque económico global. Ingenieros y arquitectos serán siempre protagonistas de este proceso de soluciones hacia un mundo sostenible y tendrán que ser llamados también a colaborar para que la reactivación económica sea a su vez una ocasión de paz, desarrollo, crecimiento del país y, sobre todo, la ocasión del ejercicio del principio de responsabilidad.
Sea a nivel regional o global, se necesita el compromiso, de la profesionalidad y habilidad de los ingenieros y arquitectos, tanto para minimizar los principales problemas ambientales y sociales, aún sin resolver, ya sea porque en este contexto la capacidad de diseño de estos profesionales está conectado con la investigación y las nuevas tecnologías. Por ello, la ingeniería y la arquitectura son profesiones que requieren cada vez más responsabilidades, incluso éticas, porque quienes diseñan y aplican las nuevas soluciones tecnológicas deben hacerse cargo de todas sus consecuencias, evitando el empeoramiento de los problemas socioeconómicos. Este es un compromiso que consolida y amplía el papel profesional, haciéndolos protagonistas del debate político y aliados de las instituciones en la construcción de la sociedad venidera. Es ahora o nunca el reto desde la aceleración hasta la disponibilidad generalizada a las redes a nuevas infraestructuras de movilidad, desde intervenciones contra la inestabilidad hidrogeológica hasta un plan sostenible para la eficiencia energética mobiliaria y para la regeneración urbana, desde edificaciones en base a principios bioclimáticos adaptada al contexto geográfico hasta políticas reales de ecología industrial.