Un maestro chévere
Autor: Heriberto Solís Sosa- docente de la Facultad de Humanidades USAT
Según Fernando Lozzia, “Una persona dinámica es aquella que hace algo para cambiar al mundo y a la gente. La magnitud de su obra puede que no sea grande, pero es un hecho que el mundo queda un poco diferente porque aquella persona ha vivido y actuado en él”. Eso es ser una persona dinámica.
Ahora ¿cómo se define el cariño? Desde el punto de vista psicológico, podemos describirlo como una pasión del ánimo que está asociada con el afecto y el amor sin connotaciones sexuales. Veamos entonces qué es la confianza. Según Laurence Cornu, Doctora en filosofía: “La confianza es una hipótesis sobre la conducta futura del otro. Es una actitud que concierne el futuro, en la medida en que este futuro depende de la acción de otro”, entiéndase entonces que “confianza” no significa que el alumno le falte el respeto al profesor. Respecto al dominio del tema, se podría decir que es la capacidad que tiene el docente para abarcar el tema desde diferentes puntos de vista. Además, que es la capacidad de relacionarlo y manifestarle al alumno para explicarle cómo le va a servir en su formación, al mismo tiempo es capaz de absolver todas las dudas e inquietudes de sus alumnos. Cuando nos referimos a la metodología de enseñanza, para mí es la parte central del proceso de enseñanza porque se basa en la planificación de objetivos, aplicando un conjunto de técnicas coordinadas.
Los alumnos entienden que el docente es su amigo y los ayuda a superarse. Los maestros saben que el principio de trascendencia en el ser humano- en su caso- es, esforzarse para hacer de sus alumnos hombres y mujeres útiles a la sociedad. Es por esa razón que está en los docentes la transformación del mundo en que vivimos, porque depende de estos hacer libres las mentes de nuestros alumnos, comprometidos con el desarrollo social de su comunidad y de su entorno, críticos y no sumisos con capacidad de elegir y ser elegidos, capaces de respetar el uno al otro aprendiendo de esta manera vivir en comunidad, que aprendan que el milagro de vivir en paz no depende de un ser superior, depende de nosotros mismos. Por todo esto yo de ahora en adelante me esforzaré cada día por ser un “maestro chévere” ¿Y tú?.