Premiación del 1er Concurso Nacional de Pintura USAT
Luego de una contienda donde primó el mensaje, la belleza de los trazos y la sutileza de los colores, se dio a conocer los nombres de las obras ganadoras del 1er Concurso Nacional de Pintura USAT, La Paz y Los Derechos Humanos, certamen organizado por la Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo, en el marco de sus 25 años- Bodas de Plata USAT.
Las obras finalistas destacaron por su alto nivel de oficio pictórico, y la ardua tarea de elegir a los ganadores recayó en los jurados Ana Osorio Velit, artista, curadora y gestora cultural; Luis Lama Mansur, crítico de arte y curador; y Alexander Cruz Salazar, artista y maestro de arquitectura USAT.
La premiación se realizó en la galería arte del Centro Cultural Ochocalo, lugar donde se llevó a cabo una muestra pública de las obras finalistas, durante una semana. Resultaron ganadoras las obras siguientes:
- Primer premio: “La libertad bajo sombra” del artista Rubén Saavedra Cobeñas
- Segundo premio: “Antes soñaba” del artista Alexander Dionisio Tongombol Malca
- Mención de honor: “Ofrenda para la paz” del artista Jesús Víctor Salvador Portuguez
Asimismo, en mérito a sus facultades, el jurado otorgó el reconocimiento especial a las obras “Oscura intimidad”, “Vida plena” y “Nuestro día a día” de los artistas José Gómez Hernández, Carlos García Tello y Frank Osmar Chávez Torres, respectivamente.
La obra ganadora “La libertad bajo sombra”, en palabras de su autor, es de aspecto teatral, pues hace jugar a cada objeto como actor de un drama, cada rincón y cada color, tienen una responsabilidad en el cuadro; es un cuadro que reflexiona sobre la lucha de la paz y la libertad a través de símbolos establecidos en el inconsciente colectivo peruano: ironía y controversia son los ejes principales del cuadro.
Al respecto, el ganador del primer premio, Rubén Saavedra expresó su sentir tras conocer el resultado: “Me siento con una gran responsabilidad en ser parte de esta estimulación. Agradezco la precisión del jurado calificador, que, siendo imparcial, ha podido tener una visión acertada de las obras; ha sido un lujo poder tener a uno de los mejores críticos de nuestros tiempos como jurado y ello es una señal de que el señor Tongombol y Salvador Portuguez van por un camino sólido y esperanzador en nuestra plástica”.
Asimismo, compartió su felicidad de poder conocer a los otros ganadores y conversar con otros artistas que asistieron a la exposición y ver el movimiento artístico de la región.“Este concurso es un gran paso para reunir artistas de muchas regiones e intercambiar ideas y realidades. Realmente es interesante ver como la USAT está asumiendo un rol protagónico en promoción y responsabilidad cultural, no únicamente en las artes plásticas sino en distintas áreas y disciplinas, es un ejemplo y demostración que la responsabilidad privada es siempre más eficiente que las estatales», aseguró.
La iniciativa brotó del Instituto de Cultura ICUSAT de esta casa superior de estudios, con el objetivo de mostrar el arte regional de Lambayeque, así como el arte nacional. Así lo expresó con gran satisfacción, el director del ICUSAT Carlos Mendoza Canto, cuyo deseo era“ampliar el panorama de la producción artística del Perú, generando presencia de las regiones y provincias”.
Comentarios positivos
Juan Peralta Berríos, historiador del arte, curador y crítico, quien fue invitado en representación de los jurados Luis Lama y Ana Osorio comentó su punto de vista de este certamen: “Es interesante, es una gestión que obliga a las regiones a generar una actividad creativa desde la cultura para promover esta relación arte-sociedad. Estas iniciativas son importantes y necesarias para sensibilizar a las personas y generar la descentralización, para fomentar la libertad”.
Respecto al tema del concurso “La paz y los derechos humanos”, precisa que es un título preciso para la coyuntural mundial. En este concurso encuentra trabajos interesantes con propuestas y tácticas contemporáneas, con elementos icónicos y lenguaje popular, indicó.
Peralta considera que este tipo de concursos permite promover las culturas creativas que generan identidad, pues“de lo contrario, seríamos una sociedad sin imagen, sin representación”. “Es conveniente que se sigan realizando este tipo de actividades, con los universitarios, por ejemplo, talleres de mediación donde haya diálogo, opinión, reflexión. La cultura es un eje transversal que debe estar presente en todas las carreras, en todas las edades, en todos los ámbitos”.