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Perspectivas sobre la Conciliación y el Arbitraje Peruano
Entrevista al Dr.Fernando Vidal Ramírez
Con la participación de reconocidos juristas nacionales, el Centro de Conciliación y Arbitraje de la Facultad de Derecho de la USAT desarrolló con éxito la I Jornada de Arbitraje con el Estado, en la cual se analizaron diversos temas y problemas relacionados a la ejecución de las contrataciones públicas, y al arbitraje como mecanismo de solución de conflictos en el ámbito de la contratación pública.
En el marco de este evento, conversamos con el Dr. Fernando Vidal Ramírez de larga trayectoria docente, ex-Decano del Colegio de Abogados de Lima y Miembro de Número y ex-Presidente de la Academia Peruana de Derecho, quién compartió su punto de vista sobre los avances del arbitraje en el país.
Durante la solución de conflictos en el Poder Judicial ¿por qué la carga procesal se considera un obstáculo pese a que el Estado promueve el uso de la conciliación y el arbitraje?
La solución de los conflictos que se someten al Poder Judicial depende de factores sumamente complejos, siendo uno de ellos la llamada carga procesal. Aunque se debe de reconocer los esfuerzos que desde la presidencia del Poder Judicial se vienen haciendo para mejorar el sistema de administración de justicia por la Jurisdicción Ordinaria, cada día aumenta el número de litigantes y la carga procesal se torna más pesada, a lo que hay que agregar los problemas que se generan cuando el magistrado no honra el excelso ejercicio de la función jurisdiccional .Facultades de Derecho como los de esta Universidad deben colaborar promoviendo la vocación por la función jurisdiccional pues, lamentablemente, no todos los que llegan a la magistratura o a la judicatura tienen la necesaria vocación y la debida formación. Pero es necesario también que en la formación de los abogados se haga ver que la abogacía es una noble profesión que debe ser permanentemente honrada por quien la ejerce. La conciliación fue pensada para aliviar la carga procesa pero no ha dado los resultados esperados y el arbitraje tiene sus limitaciones porque hay conflictos que no son susceptibles de arbitrarse.
¿Qué opina sobre la creciente tendencia de los abogados a formarse como árbitros?
El arbitraje en el Perú surge en los últimos años como alternativa en la solución de controversias frente a un Poder Judicial que no es lo suficientemente eficiente. Además, siendo sincero, el abogado que litiga en el ámbito arbitral no tiene las incomodidades que encuentra en el ámbito de la jurisdicción ordinaria. El abogado litigante debe estar preparado para ejercer la defensa en uno u otro ámbito, por lo que su formación debe tener esa orientación. Respondiendo a su pregunta, es cierto que hay una tendencia de los abogados a actuar como árbitros. Puede ser por vocación para administrar justicia y el mejor entorno que le brida el arbitraje, además, por qué no decirlo, porque el arbitraje le asegura el pago de sus honorarios, pues la normativa que regula el arbitraje determina que la función sea remunerada, pues proceso arbitral supone un pago por parte de quienes litigan, siendo a veces un requisito para la admisibilidad de la demanda, de la contestación o de la reconvención. . Es legítimo, pero en mi opinión, el abogado que quiere ser árbitro, no debe dejar de ser abogado. En muchas oportunidades, me han llamado a integrar tribunales arbitrales pero también ejerzo la defensa en procesos arbitrales. Desde mi experiencia, el abogado debe conjugar ambos aspectos, porque es así como puede realizar su vocación por la justicia.
Desde su punto de vista, ¿cuáles son las principales fortalezas y las principales debilidades que puede identificar en nuestro sistema arbitral vigente?
El árbitro debe ser una persona idónea, si no es especialista al menos debe tener conocimiento del tema a debatir y no ser un improvisado. Las partes al escoger a los árbitros, deben tener en cuenta su especialidad y trayectoria, pues la honestidad es imprescindible tanto en el árbitro como en el abogado que defiende. El merecimiento para ser designado árbitro o para que se confíe la defensa está determinado por el prestigio del abogado y su trayectoria profesional. El sistema arbitral es un buen sistema pero debe ser preservado de los vicios y corruptelas que tanto daño le hacen a la jurisdicción ordinaria. .
¿Considera adecuado que el arbitraje sea obligatorio en las contrataciones con el Estado?
Creo que sí. La Ley de Contrataciones de Estado ha establecido una fórmula solución rápida. Si un contratista del Estado tiene que ir al Poder Judicial, probablemente sean varios años de proceso, mientras que en el sistema arbitral, por lo general, no pasa de un año. Esta rapidez para resolver controversias es conveniente para los intereses del Estado y también para sus contratistas.
¿Qué reformas serían necesarias para mejorar la aplicación del arbitraje en la de solución de conflictos con el Estado?
Una mayor apertura al convenio arbitral, es decir, que tenga un margen más amplio del que actualmente tiene, para que las partes tengan mayores posibilidades de establecer las condiciones bajo las cuales debe llevarse a cabo el proceso arbitral. En esto como en todo, el factor humano es preponderante. El arbitraje debe depender siempre de la voluntad de las partes. Los árbitros deben actuar con autonomía e imparcialidad sólo cuando tengan que decidir y resolver la controversia.
FERNANDO VIDAL RAMIREZ, en ejercicio desde 1962, Lima. Educación: Universidad de San Marcos, Lima. Abogado y consultor. Profesor Universitario. Miembro de la Comisión que redactó el Código Civil vigente. Ex Presidente de la Bolsa de Valores de Lima. Ex Presidente de la Federación Iberoamericana de Bolsas de Valores.. Ex-Decano del Colegio de Abogados de Lima. Miembro de Número y ex-Presidente de la Academia Peruana de Derecho. Juez Ad Hoc en la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Presidente del Tribunal de Honor del Pacto Etico Electoral. Árbitro del Centro de Conciliación y Arbitraje de la Universidad Católica Santo Toribio de Mogrovejo.
